18 diciembre 2007

Las siete Cucas

El otro día oí una historia de Peñaranda. Es un antigua leyenda sobre un crimen. Sucedió a finales del siglo XIX. Ricardo, el "Coquiles" casado con Saturnina, "la Cuca", padre de seis hijos, acompañado por otros dos jóvenes robó en la casa del amo para el que trabajaba como picapedrero de ferricarril. En el hurto mataron a la sirvienta y a la misma mujer del amo.
Pronto los arrestaron y les juzgaron en Salamanca. Fue muy conocido el juicio porque fue el primero con jurado popular. Los delincuentes fueron condenados a garrote vil. La ejecución tuvo lugar en Peñaranda ante 10.000 personas.

Esta historia la relató años más tarde Eugenio Noel en un libro titulado "Las siete cucas. Una mancebía en Castilla". Parece ser que después de la condena, el pueblo entero negó la palabra y la misericordia a la viuda y a las hijas del Cuquiles. Las echaron del pueblo, se aprovecharon de ellas... Vejadas y desesperadas, madre e hijas, montaron un burdel (mancebía) a las afueras y allí pudieron vengarse de todos aquellos que las repudiaron en su día, ya que todos acudían al prostíbulo siendo objeto de habladurías y chismes.

Mucha gente mayor todavía recuerda cómo de pequeños en lugar de decirles "duérmete que viene el Coco, les decían duérmete que viene el Cuquiles".

12 diciembre 2007

Mandanga 7. Premios solidarios

Ayer, fuimos un grupo de peñarandinos a Salamanca a una gala de la Cruz Roja, los XII Premios Solidarios. Habían nominado el programa "Leo para ti" que se lleva desarrollando desde hace dos años. Una iniciativa de la Biblioteca Pública para acercar la lectura a aquellas personas que no se pueden acercar a la biblioteca.
Siguiendo con el dicho de la montaña y Mahoma, somos casi veinte los voluntarios que semanalmente acudimos a la residencia de ancianos, a la asociación de discapacitados psíquicos y a casa particulares a leer en voz alta a un total de cincuenta y una personas.
La gala fue presentada por Mercedes Milá y el proyecto estaba en la categoría de Premios Solidarios para Mayores, entre otros dos nominados. Y nos lo llevamos.
Aplausos, sonrisas, miradas de complicidad, abrazos... En fin, que todo el Casino de Salamanca se enteró bien de que estábamos allí. Hoy hay sido un día de felicitaciones y júbilo.
Y la de gente que de forma desinteresada ayuda a los demás. Acciones como esas me reconcilian con el mundo. Porque, ¿de qué sirve ayudar al tercer mundo si no miramos de frente, si no cuidamos, a los que tenemos al lado?

04 diciembre 2007

Punto de rocio

Esta mañana ha amanecido con las calles mojadas, los bancos de las plazas, los árboles goteando... parecía como si hubiese llovido durante toda la noche o hubiera helado y estuviera deshelando.

Pero no, es lo que se llama el punto de rocío. Tiene que ver con la neblina o la condensación del aire. Cuando baja la temperatura empieza a helar, si no baja de cero grados entonces se produce el punto de rocío.

Ayer también sucedió algo extraordinario, encontré en la frutería boniatos. Desde que vivo aquí no los había visto ni en el mercado ni en ninguna tienda.

Hoy, en punto de rocío he comido un cocido con boniatos.
Brilla el sol.

03 diciembre 2007

Regalos

Se dice que los regalos enriquecen y fortalecen las relaciones sociales. Y si además se le acompaña con una ramita de muérdago u olivo, se desea abundancia, prosperidad y felicidad a quien se regala.

Los japoneses inventaron el papel decorado expresamente para el que iba dirigido el regalo.
Formaba parte de un ritual. Hay quien piensa que el regalo conlleva un sacrificio si no no tiene valor. Un sacrificio del que regala, un esfuerzo, pensar en qué regalar, envolverlo con un papel especial, colocarle una ramita de muérdago, escribir unas palabras en una tarjeta...

La cantidad de dinero que haya costado es lo de menos. Imprimir al regalo de los buenos deseos, de los sentimientos que despierta en ti la persona a quien regalas. Personalizarlo con unas palabras escritas expresamente para esa persona...

Recordar la esencia del regalar. Agradecer al otro el estar a tu lado o que forme parte de tu vida.

01 diciembre 2007

Mirando bocadillos, comiendo palabras

Mañana de resaca.
Hoy el día amaneció nublado. Llueve a ratos. Poco. Parece como si las nubes no se decidieran. Como si dudaran en vaciarse de golpe. Y van dejando caer las gotas de a poco. Si esta noche hiela, podremos sacar los patines.
Anoche estuve en Ávila. Encontré a gente estupenda. Estuvimos en cenando en un bar unos bocadillos enormes y buenísimos. Hablamos sin parar durante horas. Hacía tiempo que no me lo pasaba tan bien. Ahora ya no me importa si me quedo una temporada más.