25 mayo 2006

Las estrellas

El electricista del cielo enciende cada noche las estrellas. Les quita el polvo con su plumero y enrosca bien las bombillas. A veces para divertirse las sopla y las estrellas caen. Y si sopla muy fuerte caen muchas y parece que está lloviendo estrellas. A todo aquel que esté mirando el cielo una de esas noches se le mete una estrella dentro. Es por eso que dicen que todos tenemos una estrella, el secreto está en saber, como el electricista, hacerla brillar.

15 mayo 2006

Las cigüeñas

Una de las cosas que más me llamaron la atención cuando vine a vivir a Castilla fueron las cigüeñas. En Valencia hay gaviotas pero no cigüeñas y no se ven los enormaes nidos en lo alto de campanarios, ni en postes de la luz, ni en pináculos, cornisas o repisas de ventanas. Allí se escucha el sonido agudo y ensordecedor de las gaviotas. Aquí el crotorar de las cigüeñas.

Cuando paseo por el pueblo las oigo y las miro en sus nidos dándoles de comer a los polluelos. Estas aves de paso que se quedan porque los tiempos cambian, que antes pescaban y ahora las encuentras sobrevolando vertederos, protagonizan multitud de fábulas en nuestro país.
Estas aves raquíticas y zancudas traen los niños de París. Los griegos ya la asociaban con la familia. Y es que se emparejan para siempre y utilizan el mismo nido durante años.
Me contaban hace poco cómo explicaron a una niña que su hermano había nacido muerto. La cigüeña perdió el equilibrio en el vuelo, se le cayó el bebé y se mató.

Ellas viven ajenas a todo eso. Ellas vuelan tranquilas, alimentan a sus crías, observan impasibles el azul del cielo castellano, como si supieran que nadie les puede hacer daño, que forman parte del paisaje de muchas ciudades y que sin ellas todo sería distinto. Después de todo, ellas estaban primero.

11 mayo 2006

Las golondrinas

El cielo de Castilla se ha llenado de golondrinas y parece que el buen tiempo se queda por aquí una temporada. Desde la buhardilla de un escondido lugar se escuchan los pájaros y el cielo es azul. Sin nubes. Raso. Limpio.
Y ahora recuerdo la historia de las golondrinas que son símbolo de buen agüero entre las sociedades de Siberia. Allí dicen que fue una golondrina quien llevó el fuego a aquellas gentes. Durante la huida, su cola fue partida por una flecha del guardián del fuego y es por eso que la golondrina tiene su cola partida en dos. Cuando las golondrinas llegan por aquellas tierras hacen una fiesta. En todas las casas hay unas pequeñas casitas de madera para ver si hay suerte y alguna golondrina se queda durante el verano allí porque seguro que van a tener un buen año.